Las vacaciones y celebraciones de fin de año próximas traen consigo un espíritu festivo que, si bien es motivo de celebración, también plantea riesgos adicionales en las carreteras.
Mover mercancías a lo largo y ancho del país, por carreteras que conectan zonas productivas con centros de distribución y consumo, requiere una logística eficiente, pero sobre todo segura; en este contexto, el mantenimiento preventivo de los vehículos de transporte juega un papel clave.
Una de las principales preocupaciones para las empresas de transporte y para los conductores es la seguridad de la carga. Las pérdidas económicas derivadas de accidentes, robos o mal manejo de la carga son considerables, y en muchos casos, se pueden prevenir con medidas adecuadas.
En un mundo cada vez más conectado, la tecnología ha demostrado ser un aliado crucial para enfrentar desafíos en diversos sectores, y la seguridad vial no es la excepción.
Recientemente se presentó un Proyecto de Ley que procura aumentar la protección para los ciclistas y endurecer las sanciones para los conductores que los atropellen; destacando la necesidad urgente de un marco normativo que garantice no solo la seguridad, sino también la convivencia en las carreteras.
El sector exportador colombiano continúa demostrando su resiliencia y dinamismo. Según las últimas cifras, las exportaciones por contenedores experimentaron un crecimiento del 4.5% entre enero y julio de este año, lo que representa un incremento significativo en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Colombia, conocida por su rica biodiversidad y su creciente economía, se encuentra en un punto de inflexión en su desarrollo industrial; en la última década el país ha experimentado un cambio significativo en su enfoque hacia la innovación, reconociendo su importancia crucial para el crecimiento económico y la competitividad global.
La adecuada infraestructura vial en las zonas rurales de Colombia es fundamental para impulsar el desarrollo económico, social y la integración de estas regiones con el resto del país, pero a pesar de los esfuerzos realizados en años anteriores, la situación actual de las vías terciarias sigue siendo un desafío significativo.
En los últimos años, el tema de la movilidad sostenible ha cobrado una relevancia sin precedentes en Colombia y en el mundo, ante el inminente agotamiento de los combustibles fósiles y el impacto ambiental que su uso conlleva, la transición hacia vehículos eléctricos se ha convertido en una prioridad.
La lluvia es un factor determinante en la seguridad vial, ya que reduce drásticamente la tracción de los neumáticos, disminuye la visibilidad y prolonga las distancias de frenado; por eso es importante adoptar una actitud responsable al volante, que pueda minimizar los riesgos y contribuir a la seguridad de todos en las vías, bajo estas condiciones adversas.